La influencia humana en el sistema climático es clara y va en aumento: V Informe del IPCC
La influencia humana en el sistema climático es clara y va en aumento, y sus impactos se observan en todos los continentes. Si no se le pone freno, el cambio climático hará que aumente la probabilidad de impactos graves, generalizados e irreversibles en las personas y los ecosistemas. Sin embargo, existen opciones para la adaptación al cambio climático, y con actividades de mitigación rigurosas se puede conseguir que los impactos del cambio climático permanezcan en un nivel controlable, creando un futuro más claro y sostenible.
Estas son algunas de las principales conclusiones del Informe de síntesis publicado el domingo por el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC).
El Informe de síntesis expone e integra las conclusiones del Quinto Informe de Evaluación del IPCC producidas por más de 800 científicos y publicadas en los últimos 13 meses: la evaluación del cambio climático más completa jamás realizada.
“Tenemos los medios para limitar el cambio climático”, afirmó R.K. Pachauri, Presidente del IPCC, quien añadió que “las soluciones son muchas y permiten el continuo desarrollo económico y humano. Todo lo que necesitamos es voluntad de cambio, y confiamos en que esa voluntad esté motivada por el conocimiento y la comprensión de la ciencia del cambio climático”.
El Informe de síntesis confirma que el cambio climático se constata en todo el mundo y que el calentamiento del sistema climático es inequívoco. Desde la década de 1950 muchos de los cambios observados no han tenido precedentes en los últimos decenios a milenios. “Nuestra evaluación concluye que la atmósfera y el océano se han calentado, los volúmenes de nieve y hielo han disminuido, el nivel del mar se ha elevado y las concentraciones de dióxido de carbono han aumentado hasta niveles sin precedentes desde hace, por lo menos, 800 000 años”, dijo Thomas Stocker, Copresidente del Grupo de trabajo I del IPCC.
En el informe se expresa con mayor certidumbre que en anteriores evaluaciones el hecho de que las emisiones de gases de efecto invernadero y otros impulsores antropógenos han sido la causa dominante del calentamiento observado desde mediados del siglo XX.
Los impactos del cambio climático ya se han sentido en los últimos decenios en todos los continentes y océanos.
Cuanta mayor sea la perturbación de la actividad humana sobre el clima, mayores serán los riesgos. El informe concluye que las emisiones continuadas de gases de efecto invernadero causarán un mayor calentamiento y cambios duraderos en todos los componentes del sistema climático, con lo que aumentará la probabilidad de impactos generalizados y profundos que afecten a todos los niveles de la sociedad y el mundo natural.
El Informe de síntesis sostiene con claridad que muchos riesgos son particularmente problemáticos para los países menos adelantados y las comunidades vulnerables, dada su limitada capacidad para afrontarlos. Las personas marginadas en los ámbitos social, económico, cultural, político, institucional u otro son especialmente vulnerables al cambio climático.
Efectivamente, la limitación de los efectos del cambio climático a un tiempo plantea problemas de equidad, justicia e igualdad y es necesaria para lograr el desarrollo sostenible y la erradicación de la pobreza. “Muchas de las personas más vulnerables al cambio climático apenas han contribuido y contribuyen a las emisiones de gases de efecto invernadero”, señaló el señor Pachauri. “No será posible afrontar el cambio climático si los distintos agentes anteponen sus propios intereses de forma independiente; solo se alcanzarán resultados positivos con respuestas colectivas, en particular de la cooperación internacional”.
“La adaptación puede contribuir decisivamente a disminuir estos riesgos”, señaló Vicente Barros, Copresidente del Grupo de trabajo II del IPCC. “La adaptación es tan importante porque puede integrarse en la senda del desarrollo y ayudar en la preparación para los riesgos que ya estamos obligados a afrontar en razón de las emisiones pasadas y la infraestructura actual”.
Pero la adaptación por sí sola no basta. Para limitar realmente los riesgos del cambio climático, es necesario reducir de forma sustancial y sostenida las emisiones de gases de efecto invernadero. Y en la medida en que la mitigación reduce la tasa y la magnitud del calentamiento, también dilata el tiempo de que disponemos para la adaptación a un nivel determinado del cambio climático, potencialmente en varios decenios.
Son muchas las trayectorias de mitigación que conducen a la consecución, en los próximos decenios, de las sustanciales reducciones de las emisiones necesarias para limitar, con probabilidades de éxito superiores al 66%, el calentamiento a 2 ºC: el objetivo fijado por los gobiernos. Sin embargo, el informe afirma que si la mitigación adicional se demora a 2030, aumentarán considerablemente los retos tecnológicos, económicos, sociales e institucionales asociados a la limitación, en el siglo XXI, del calentamiento a menos de 2 ºC en relación con los niveles preindustriales.
“La transición a una economía con bajas emisiones de carbono es técnicamente viable”, dijo Youba Sokona, Copresidente del Grupo de trabajo III. “Pero lo que faltan son políticas e instituciones adecuadas.
Cuanto más esperemos a actuar, mayor será el costo de la adaptación al cambio climático y su mitigación”. El Informe de síntesis concluye que las estimaciones de los costos de la mitigación varían, pero el crecimiento económico global no se vería demasiado afectado. En los escenarios en que se dejan seguir las cosas tal cual, el consumo –indicador del crecimiento económico– crece entre el 1,6 y el 3% anual a lo largo del siglo XXI. Con una mitigación ambiciosa se reducirían esos índices en alrededor de 0,06 puntos porcentuales. “En comparación con el inminente riesgo de impactos irreversibles del cambio climático, los riesgos de la mitigación son razonables”, dijo el señor Sokona.
En estas estimaciones económicas de los costos de la mitigación no se consideran los beneficios de un cambio climático de menor magnitud, así como tampoco los numerosos cobeneficios relacionados con la salud humana, los medios de subsistencia y el desarrollo. “La base científica que avala la priorización de la acción respecto del cambio climático es más clara que nunca”, afirmó el señor Pachauri. “No nos queda mucho tiempo antes de que la ventana de la oportunidad de permanecer en el margen de los 2 ºC de calentamiento se cierre. Para tener buenas posibilidades de permanecer por debajo de los 2 ºC a costos razonables, deberíamos reducir las emisiones entre un 40 y un 70% a nivel mundial entre 2010 y 2050, y disminuirlas hasta un nivel nulo o negativo en 2100. Tenemos la oportunidad, y la elección está en nuestras manos”.
Consulta la nota de prensa del IPCC sobre el informe aquí
Se puede consultar el informe aquí:
Fuentes:
Informe Final del IPCC del 1 de noviembre de 2014