Empezó semana clave para el éxito de la COP21
Durante cinco días en Bonn, Alemania, el Grupo de Trabajo sobre la Plataforma de Durban para una Acción Reforzada (ADP, por sus siglas en inglés) trabajará para finalizar el borrador del acuerdo, que será luego negociado durante la COP21 de París, en diciembre de este año. Se espera que el texto se convierta en un acuerdo mundial que permita hacerle frente al cambio climático y proteger la vida del planeta.
Del 19 al 23 de octubre, los países de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC) tienen la última oportunidad antes de la COP21 para trabajar formalmente sobre el borrador del acuerdo. La meta principal de la reunión es lograr tener una base clara y concisa para las negociaciones en París, sin la cual será mucho más difícil concluir la cumbre exitosamente. Durante esta semana los negociadores se reunirán cada día en una plenaria y discutirán el texto párrafo por párrafo, siguiendo el orden del documento (durante la última sesión de septiembre, los negociadores trabajaron en grupos pequeños, repartiéndose los temas del borrador). Se espera que el viernes, los países hayan aprobado una nueva versión del borrador, para que en la COP21 se puedan tomar las decisiones finales partiendo de un texto claro y representativo de las posiciones de los países.
El camino hacia París
Según explica Anna Pérez Catalá de Adopt a Negotiator, las negociaciones de la CMNUCC siguen avanzando hacia la meta de París. Después del fracaso de la Cumbre de Copenhague en 2009, todos los países acordaron en Durban (2011) construir un nuevo proceso que les llevará a un acuerdo global de reducción de emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI). Después de cuatro años de negociaciones, este diciembre se celebrará la COP21, que culminará este largo proceso.
En Copenhague, las negociaciones eran ocultas y terminaron en un fracaso. Para evitar ese escenario, se trabaja, camino a la COP21, en sesiones enfocadas en la “transparencia” y “basadas en la confianza”.
Durante estos 21 años, continúa Pérez Catalá, las negociaciones se han vuelto muy complejas y han ido incorporando nuevos temas. A la agenda que pretendía reducir emisiones que generan el cambio climático, ahora también se le suma la adaptación a su impacto, la ayuda a los países más vulnerables, además de tener en cuenta temas de género y derechos humanos, posturas que están alentando, entre otros, los países de la región latinoamericana.
Negociaciones transparentes
En la COP20, desarrollada en Perú en diciembre del 2014, los países aprobaron la primera versión del borrador de acuerdos. En Ginebra (febrero) se incorporaron al texto todas las propuestas de los países, y el documento pasó de 39 a 80 páginas. En los meses siguientes, los países se enfocaron en mejorar el borrador de acuerdos, hacerlo más manejable, eliminar las duplicidades, y fusionar las propuestas.
En las dos siguientes sesiones en Bonn (junio y septiembre) se intentó realizar este trabajo de “limpieza” del texto, pero los avances se dieron más en términos de definición de conceptos y posiciones, y se trabajó en la confianza. Al final de la sesión de septiembre, Laurence Tubiana, enviada especial del gobierno de Francia sobre cambio climático, declaró que: “Se tienen todas las piezas del rompe – cabezas”, además Christiana Figueres, secretaria de la CMNUCC, sostuvo que: “todos avanzan en la misma dirección”.
Otro hito importante de la última sesión fue que los países aceptaron que los co-presidentes del ADP produzcan un nuevo texto de negociación, basado en los avances de la semana. Este nuevo borrador fue publicado el 5 de octubre pasado, y servirá de base para la sesión de toda la semana.
Fuente: ConexiónCOP